Parece ser el cuento de nunca acabar. De tener una ilusión latente y soñar con el Mundial Catar 2022, Bolivia volvió a resignar parte de sus chances al caer ayer 4-1 en su visita a Venezuela, en partido correspondiente a la fecha 15 de las eliminatorias sudamericanas y que se jugó en el estadio Agustín Tovar, en Barinas.
Pese a la derrota y que las chances disminuyeron notablemente, en gran medida con la victoria de Perú en Barranquilla sobre Colombia, la esperanza de la Verde puede seguir viva si el martes supera a Chile (16:00) en el estadio Hernando Siles.
Venezuela dominó los primeros minutos del encuentro ante una Bolivia que esperó en su campo y trató de copar el terreno rival.
Con Yeferson Soteldo y Salomón Rondón, la Vinotinto buscó inquietar el arco de Carlos Lampe, pero sin mucha fortuna al inicio.
Bolivia tuvo la primera chance de gol a los 15 minutos, tras un error provocado por el meta llanero Wuilker Fariñez, que tocó el esférico con Nahuel Ferraresi. Este perdió el balón tras la marca de Moisés Villarroel, que cedió para el remate de Marcelo Martins que se fue levemente desviado.
La Verde tomó el pulso del encuentro y este se hizo de ida y vuelta.
A medida que Bolivia trepó varios metros, Venezuela aprovechó para abrir la cuenta a los 24’ PT, tras una magistral triangulación entre Soteldo, Óscar González y el cabezazo de Rondón que se coló en el primer poste de Lampe (1-0).
Bolivia buscó reaccionar, pero incomprensiblemente dejó crecer más al dueño de casa al regalarle su mediocampo y permitir que la Vinotinto amplíe cifras a los 34’ PT, tras un toque de González y la definición de Rondón que el zaguero Jairo Quinteros no consiguió cortar y que Lampe, en postura estática, no pudo evitar el 2-0.
Cuando parecía que la noche caía en Barinas para la Verde, sobre 37’ PT un centro milimétrico de Juan Carlos Arce desde la banda derecha y un potente testazo de Bruno Miranda derrotó a Fariñez y revivió la esperanza boliviana (2-1).
En el complemento, cuando Bolivia tuvo la primera chance a los 6’ ST con un tiro libre de Martins que rozó el arco de Fariñez, un infantil y grosero error de Diego Bejarano en complicidad con Lampe significó el 3-1 para Venezuela, que amplió cifras con la viveza de Darwin Machís sobre 8’ ST.
En 21’ ST, Soteldo combinó con Rómulo Otero y este con Rondón que marcó su hatrick y el 4-1 final ante la pobreza defensiva boliviana.
Venezuela pudo ganar con un marcador mucho más amplio, porque el equipo dirigido por José Pékerman insistió más y tuvo más chances claras sobre el arco de Lampe.
Al final, Bolivia cayó goleada en Venezuela y ahora solo debe enfocarse en Chile para creer aún en ir a Catar.
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