Search in the Blog

Friday, March 16, 2012

Un enemigo de la altura menos

Con la renuncia de Ricardo Teixeira a la presidencia de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) también se fue el hombre que en su momento se convirtió en el principal impulsor del veto de la FIFA a la altura.

Teixeira fue el influyente personaje que, tras la caída de la selección brasileña en 1993 en el estadio Hernando Siles, ante Bolivia (2-0), por las eliminatorias para el Mundial de Estados Unidos 94, empezó a mover sus hilos en procura de que nunca más se jugaran encuentros internacionales de ese tipo en el principal escenario deportivo boliviano.

Era su revancha ante el “atrevimiento” que tuvo la selección de Xabier Azkargorta y compañía, de haber puesto punto final a casi 40 años de invicto en competiciones premundialistas del seleccionado varias veces campeón mundial.

A partir de ahí, Bolivia tuvo que encarar una lucha desigual en la que participaron dirigentes del fútbol, gobernantes y también el pueblo por más de 17 años. La historia llegó a su final el 10 de junio de 2010, cuando el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, anunció la decisión de permitir que se juegue en esos lugares, entre ellos La Paz.

Guido Loayza, actual presidente de Bolívar y titular de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) en 1993, cataloga a Teixeira como “el abanderado” del veto. Según él, fue porque “le dolió demasiado perder el invicto en eliminatorias después de 39 años”.

Esa alusión hace que se retroceda al 25 de julio de 1993, cuando Bolivia se impuso con goles de Marco Etcheverry y Álvaro Peña. Ese triunfo fue considerado entonces uno de los golpes más duros sufridos por la todopoderosa “verde amarelha”.

Don Guido recuerda que hasta esa fecha se hablaba poco o nada del “tema altura” y sus efectos, pero a partir de entonces “se hizo una causa que tuvo como abanderados a Teixeira y a la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF)”. La defensa de la altura “la empezamos en el mismo año 93, cuando llevamos un estudio médico a Suiza, con el doctor Mario Paz Zamora”.

Después de ello la historia es conocida, años y años de lucha para terminar con el veto, por eso Loayza cree que la “caída” de Teixeira de la Confederación Brasileña de Fútbol “es una buena noticia, celebro que se haya podido romper esa rosca, que esa acción sirva como ejemplo para otros países”.

Tarda, pero llega. Hay dirigentes, en todas partes, quienes “se amparan en que el fútbol es totalmente autónomo y que nadie del exterior puede intervenir. Esa situación no los hace inmunes a la justicia, que puede tardar; pero al final llega”. Loayza cree que para la salida de Teixeira de la CBF y también del Comité Organizador Local (COL) del Mundial 2014, mucho tuvo que ver la intervención del Gobierno y del Parlamento brasileños.

“La gente que cree que es todopoderosa, en algún momento tiene que caer” y “la decisión de la Presidencia del Brasil (de la mandataria Dilma Rousseff) y del Parlamento de ese país, ha sido definitiva para que este señor tenga que irse”.

Según Percy Luza, presidente de la Comisión Nacional de Selecciones de 1993 y estrecho colaborador de Loayza, Teixeira fue “el principal enemigo” de la altura. “Recuerdo perfectamente que después de que le quitamos el invicto a Brasil, comenzó a actuar en contra de que se juegue en La Paz”.

Continuamente y mientras fue presidente de la CBF “siempre estuvo reclamando, pero finalmente toda su campaña cayó en saco roto. En los últimos años, al no encontrar mucho apoyo a nivel sudamericano, se olvidó del tema; pero recuerdo que en años anteriores, él permanentemente estuvo tocando el asunto”.

Por eso cree que “su salida de la Confederación Brasileña no tiene ninguna trascendencia para el país ahora, porque como ya lo manifesté perdió apoyo en los países de la Conmebol, entonces perdió trascendencia su lucha para no jugar en La Paz, y que yo tenga conocimiento en el último tiempo ya no incidió en el tema. Su marcha, por tanto, no significa nada”.

Luza, uno de los hombres fuertes de la FBF en la década de los 90, califica a Teixeira “como un hombre controvertido, que si bien permaneció por 23 años en la Confederación Brasileña, eternamente le llovían las críticas sobre su gestión. La presión fue muy grande y no le ha quedado otra que renunciar”.

Los datos

Dolorosa caída

Durante su gestión, para Ricardo Teixeira fue un duro golpe la derrota de Brasil en La Paz, en 1993. Su selección perdió el invicto en partidos de eliminatorias mundialistas.

Clasificados

Brasil ocupó el primer lugar de la llave y Bolivia el segundo, ambas selecciones se clasificaron en 1993 al Mundial de Estados Unidos. Al margen quedaron Uruguay, Ecuador y Venezuela.

Campeona

La selección brasileña gozó un año después de haber sido derrotada en La Paz, pues en el Mundial de 1994 —con Bebeto en gran forma— obtuvo su cuarto título.

Loayza dice que igual la relación era buena

Aunque Ricardo Teixeira fue un enemigo temporal del país y principalmente del fútbol en ciudades con altura, Guido Loayza lo califica como “un hombre normal”. En su época de presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), a Loayza le tocó compartir muchos momentos con el ahora expresidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).

Una vez hicieron una gestión conjunta para defender a Miguel Rimba y el golero Zetti, que dieron positivo en un control antidopaje por tomar mate de coca. “He tratado mucho con él. No se puede decir que era una persona de la que uno se podía vanagloriar de conocerla, tampoco que era una persona desagradable”. Más allá de su postura permanente en contra de la altitud, “con nosotros siempre tuvo buena relación”.

No comments:


untitled